La enfermedad parasítica conocida como bilharzia era endémica en Puerto Rico durante la época de la DIVEDCO. Los caracoles de agua dulce, como el que se encuentra en la esquina superior izquierda del cartel de Carlos Raquel Rivera para la película Sucedió en piedras blancas, eran portadores de la misma. Con un título que evoca una película de horror de bajo costo, esta producción de 1957 enfatiza de un modo dramático los peligros de la bilharzia en los niños, quienes eran susceptibles a contraer la enfermedad nadando en cuerpos de agua infectada. En el cartel de Rivera, tres niños sin camisetas que se preparan para nadar en una charca miran mientras un científico del gobierno de San Juan examina el agua infectada. La película, y su libro acompañante titulado Bilharzia también discute otros medios comunes de contraer la enfermedad, síntomas típicos, y métodos efectivos para prevenir su transmisión.
